Nombres comunes: Kakariki de frente roja, Perico maorí de cabeza roja, perico maorí cabecirrojo
Latín: Cyanoramphus novaezelandiae
Clasificación: Psittaciformes, Psittacidae
Zona geográfica: Nueva Zelanda
Tamaño: De 28 a 30 cm
Latín: Cyanoramphus novaezelandiae
Clasificación: Psittaciformes, Psittacidae
Zona geográfica: Nueva Zelanda
Tamaño: De 28 a 30 cm
Los periquitos neozelandeses como el Kakariki de frente roja (Cyanoramphus novaezelandiae) eran grandes desconocidos antes de los años setenta y no existía información alguna sobre ellos ni siquiera en los libros especializados. Actualmente son muy frecuentes en el mundo de la avicultura y con su vivacidad y especial encanto han conquistado el corazón de muchos aficionados. Su comportamiento contrasta enormemente con la frialdad de la mayoría de los grandes periquitos australianos. Los kakarikis (término que en maorí significa lorito) son aves que se muestran atrevidas y confiadas con sus dueños hasta el punto que pronto aprenderán a aceptar comida de la mano. Son extraordinariamente activos y nada ruidosos ni destructivos.
Fatal error: Theme at http://mundoexotics.com/wp-content/plugins/image-gallery-reloaded/themes/classic/galleria.theme.min.js could not load, check theme path.
Descripción del Kakariki de frente roja (Cyanoramphus novaezelandiae)
El plumaje general del Kakariki de frente roja (Cyanoramphus novaezelandiae) es de un atractivo tono verde oscuro con la frente, la coronilla y una mancha detrás del ojo de color carmesí. También tiene manchas de este mismo color a ambos lados del obispillo y las remeras son de color azul oscuro intenso. El pico es gris azulado brillante y el iris de color rojo rubí. Los machos son ligeramente más grandes que las hembras.
Subespecies
Exiten 8 subespecies de Kakariki de frente roja (Cyanoramphus novaezelandiae):
- Cyanoramphus novaezelandiae Novaezelandiae de amplia distribución en las islas Norte y Sur de Nueva Zelanda y presente en las islas de Stewart y Auckland.
- Cyanoramphus novaezelandiae cyanurus: presente en la isla Kermadec, al nordeste de Nueva Zelanda. Las remeras son más azules respecto a la especie nominal y las plumas de la cola también.
- Cyanoramphus novaezelandiae Chathamensis: de resencia restringida a las islas Chatham en el Pacífico, al este de la isla del Sur de Nueva Zelanda. El plumaje verde del rostro es más brillante, más esmeralda.
- Cyanoramphus novaezelandiae hoschtetteri: presente solo en la isla de las Antípodas. Los ejemplares de esta subespecie son de una tonalidad más amarillenta. Las manchas de la cabeza y la rabadilla son de color rojo anaranjado. El tamaño es algo mayor que la especie nominal.
- Cyanoramphus novaezelandiae Erythrotis: antiguamente confinada a la isla de Mcquaire, situada a muchas millas al sudoeste de Nueva Zelanda y actualmente extinguida.
- Cyanoramphus novaezelandiae Cookii: presente en la isla de Norfolk, al noeoeste de Nueva Zelanda. Esta subespecie se encuentra gravemente amenazada y está sujeta a intensos esfuerzos de conservación.
- Cyanoramphus novaezelandiae subflavescens: existente sólo en la isla de Lord Howe, frente a la costa este de Australia. Actualmente extinguida.
- Cyanoramphus novaezelandiae Saissetti: presente en la isla de Nueva Caledonia. Se desconoce su estatus actual.
Vida silvestre del Kakariki de frente roja
Esta especie habita en las islas Norte y Sur de Nueva Zelanda y las islas cercanas, también en las islas de Norfolk y Nueva Caledonia.
Hábitat
Adaptan sus costumbres al ambiente; en zonas boscosas buscan comida en las copas de los árboles y los matorrales y buscan semillas en el suelo; en las islas pequeñas prefieren los matorrales bajos y en las islas que carecen de árboles, la especie es totalmente terrestre.
Alimentación
Su dieta varia mucho de acuerdo con la estación del año. En primavera se alimentan sobre todo de brotes verdes y flores , de frutos durante el verano y de semillas durante el otoño. En invierno comen fruta y semillas.
Reproducción
La época de cría depende de la variación de las condiciones climáticas. Básicamente puede reproducirse en cualquier época del año aunque suele hacerlo entre los meses de octubre a diciembre. Para anidar prefiere las cavidades en las ramas y los troncos de los árboles, en especial de los árboles muertos. También usan grietas o aberturas en las rocas, agujeros excavados en el suelo o entre la vegetación densa. La puesta suele ser de 5-9 huevos que son incubados por la hembra sola unos 20 días. Durante este período el macho la llama desde el exterior del nido y la alimenta regurgitando la comida. Ambos progenitores alimentan a las crías, aunque generalmente el macho le da comida a la hembra y luego ésta se la da a los polluelos. Los jóvenes kakarikis, una vez han abandonado el nido, permanecen en el suelo donde son alimentados un cierto tiempo antes de que sean capaces de volar. Durante este período son especialmente vulnerables a los depredadores.
Estatus
Aunque el Kakariki de frente roja (Cyanoramphus novaezelandiae) no se encuentra globalmente amenazado, la subespecie cookii ha sido incluida en el CITES I debido al descenso de población que sufre en las dos islas principales a causa de la captura,destrucción del hábitat, depredadores (ratas) y competencia para anidar debido a la introducción de otras especies como el Platycercus elegans, el estornino común y también de abejas.
Cría del Kakariki de frente roja (Cyanoramphus novaezelandiae)
Alojamiento del Kakariki de frente roja
Las medidas de un aviario para albergar una pareja de Kakariki de frente roja deben estar entre 3,6 y 4,2 metros de largo x 1,2 de ancho x 1,80 de altura y disponer de un recinto cerrado que les proteja de las heladas durante el invierno. Estas aves pueden criar en espacios más reducidos pero son tan activos que si se les da más espacio aprovecharán cada centímetro incluido el suelo. Hay que tener cuidado con las fugas ya que los kakarikis son expertos en encontrar cualquier hueco de salida, aunque también tienen gran habilidad para encontrar el camino de vuelta. Si dispusiéramos de un ambiente libre de depredadores podríamos mantenerlos en libertad, sin embargo este es un riesgo que sus propietarios no están dispuestos a correr. Las rejas deben alojarse en jaulas aisladas y en el caso de que sean contiguas, debe utilizarse doble enrejado. Los kakarikis, especialmente los machos, pueden ser muy agresivos con los de su misma especie. Los machos jóvenes a menudo sufren agresiones por parte de sus padres. Los jóvenes que se han criado juntos pueden permanecer juntos durante un largo periodo de tiempo, pero los kakarikis adultos nunca deberían alojarse juntos, especialmente con miembros de su mismo sexo.
Dieta del Kakariki de frente roja
La alimentación del Kakariki de frente roja (Cyanoramphus novaezelandiae) no presenta ningún problema. Deben disponer de un comedero con una mezcla de semillas como la que se les ofrece a las cotorritas ninfa, con mijo, alpiste, avena y pipas de girasol. Las pipas contienen una gran cantidad de grasa y no se suelen recomendar para las aves que se mantienen en cautividad, pero los kakarikis no tienen ningún problema en quemar el exceso de grasa con su extraordinaria actividad. Cada día se les dará también una variedad de frutas ( manzana, uva, kiwi y naranja ) y verduras ( brócoli, guisantes, zanahorias, maíz dulce) y forraje. De vez en cuando se les puede ofrecer ramas con flores y brotes tiernos. Es aconsejable administrarles un complejo de vitaminas y minerales, especialmente de vitamina C en primavera y otoño. Durante la cría disfrutarán con una pequeña cantidad de gusanos de harina y carne desmenuzada junto con la pasta de cría. Los comederos se situarán en un lugar alto para evitar que metan sus patas dentro y escarben desparramando toda la comida.
Tienen la reputación de ser difíciles de mantener sanos, aunque parte del problema puede deberse a una dieta insuficiente. Otra consideración muy importante es el aporte diario de agua fresca. Estas aves morirán en, menos de 24 horas si no disponen de agua.
Tienen la reputación de ser difíciles de mantener sanos, aunque parte del problema puede deberse a una dieta insuficiente. Otra consideración muy importante es el aporte diario de agua fresca. Estas aves morirán en, menos de 24 horas si no disponen de agua.
Reproducción del kakariki de frente rojoa
El Kakariki de frente roja ha demostrado ser un ave extraordinariamente prolífica. Son muy frecuentes las nidadas grandes de entre cinco y nueve huevos. Como en la mayoría de psitácidos lo mejor es dejar que elijan su propia pareja. Si esto no es posible, se aconseja colocar la pareja que queremos formar uno al lado del otro pero en jaulas separadas durante algunas semanas para que se conozcan y se relacionen antes de introducirlos juntos en el aviario. Esto es especialmente importante si uno de los dos pájaros ha perdido a su pareja recientemente o se le ha separado de ella por algún motivo. El kakariki de frente roja crea lazos de pareja muy fuertes y no se emparejarán con otro ejemplar si ven u oyen a su antiguo compañero/a.
La época de reproducción del kakariki de frente roja es de finales de septiembre a principios de marzo. El nido que suelen aceptar es el utilizado para las carolinas con virutas de madera en el fondo. Se obtienen mejores resultados en la cría si las virutas se dejan en una esquina del suelo del nido dejando que sea la hembra quien las esparza.
La hembra pone un huevo en días alternos con una media de 5-8 huevos y el periodo de incubación es de 21 días. Los polluelos nacen con el cuerpo cubierto con un plumón blanco, que se vuelve rápidamente de color gris, a excepción de una mancha blanca en la nuca. Los jóvenes abandonan el nido a las 7 semanas de edad y pueden separarse de los padres a los 8-10 semanas. Es necesario separarlos porque probablemente la hembra inicie una nueva puesta y el macho puede molestar a los jóvenes, en especial a los de su mismo sexo. Si la pareja está bien o la primera nidada ha sido pequeña es correcto dejar que hagan una segunda. No es aconsejable permitirles una tercera.
La época de reproducción del kakariki de frente roja es de finales de septiembre a principios de marzo. El nido que suelen aceptar es el utilizado para las carolinas con virutas de madera en el fondo. Se obtienen mejores resultados en la cría si las virutas se dejan en una esquina del suelo del nido dejando que sea la hembra quien las esparza.
La hembra pone un huevo en días alternos con una media de 5-8 huevos y el periodo de incubación es de 21 días. Los polluelos nacen con el cuerpo cubierto con un plumón blanco, que se vuelve rápidamente de color gris, a excepción de una mancha blanca en la nuca. Los jóvenes abandonan el nido a las 7 semanas de edad y pueden separarse de los padres a los 8-10 semanas. Es necesario separarlos porque probablemente la hembra inicie una nueva puesta y el macho puede molestar a los jóvenes, en especial a los de su mismo sexo. Si la pareja está bien o la primera nidada ha sido pequeña es correcto dejar que hagan una segunda. No es aconsejable permitirles una tercera.
El futuro de estos periquitos neozelandeses no parece muy esperanzador si continua aumentando la destrucción de su hábitat y no se reduce drásticamente la introducción de depredadores. Solo las islas libres de tales depredadores podrán mantener poblaciones seguras de estos psitácidos, y estos santuarios serán siempre vulnerables a los abusos accidentales o deliberados por parte de los seres humanos. Actualmente el papel que juegan los avicultores en la conservación e investigación de los periquitos neozelandeses es relativamente limitado pero se va ampliado al incluir estrategias de manejo de algunas especies.
No hay comentarios:
Publicar un comentario